MI VIDA HECHA UNA REDACCIÓN
Nací en el barrio “Los Pajaritos” (Sevilla). Mi madre me puso Carlos porque mi padre decía que era un nombre muy andaluz, pero mis amigos me llaman “el Chumba”. Pertenezco a una clase social baja debido a mis orígenes. Mi madre trabajaba, bueno mejor dicho robaba comida en las tiendas y luego las vendía en el barrio. Mi padre se iba muy lejos a trabajar. Siempre me habían dicho que era escayolista, pero yo nunca lo creí, siempre sospeché que trabajaba de contrabando porque él terminó en la cárcel y todavía sigue allí. Como en mi casa no había recursos, me tuve que ir con mi tío Pepe, un hombre que me trataba muy mal y me obligaba a robar. Tenía 15 años cuando me fui con mi abuela, una mala mujer. Mi vida era un sin vivir.
Un día fui a la discoteca y me ofrecieron droga, la acepté y me enganché. Mi físico se iba estropeando cada vez más, pero tuve suerte…
Cuando iba por la calle, una chica se me acercó y me dijo que era muy guapo, que desde siempre le había gustado, pero ella no sabía que yo estaba enganchado a las drogas. Salí con ella durante mucho tiempo, pero ella estaba harta de decirme que dejara las drogas, al final me hizo escoger entre las drogas o ella. Yo le dije a ella que era mi gran amor y que la prefería a ella, pero le fallé. Me enganchaba a espaldas de ella, hasta que me pilló y me dejó para siempre.
Seguí robando, la mala vida me perseguía… Un jueves por la tarde caí malo cerca de un contenedor y un hombre bien vestido me recogió y me llevó a su casa. El hombre se había quedado en la ruina, no tenía nada en la casa, pero le tenía cariño por lo bien que se había portado conmigo. Le quitaron la casa por no pagar los impuestos, nos quedamos en la calle los dos y no tuve más remedio que empezar a robar otra vez. La policía me pilló y me metieron en la cárcel.
Ya habían pasado tres años y me concedieron la libertad por buena conducta. Conseguí desengancharme de las drogas en la cárcel y me buscaron un trabajo. La mujer con la que estuve se enteró y volvimos. Gracias a ella tengo una familia y una nueva vida que seguir.
Marina Martínez Alcaide. 3º C.
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